
Convertirse en monotributista puede parecer complicado al principio, pero en realidad es un trámite accesible, gratuito y completamente digital.
Si ya decidiste formalizar tu actividad, este paso a paso te va a ayudar a inscribirte correctamente sin cometer errores comunes ni depender de terceros.
Desde la elección de tu categoría hasta la afiliación a una obra social, este proceso está pensado para que cualquier persona que genere ingresos por cuenta propia pueda trabajar de forma legal, emitir facturas y acceder a beneficios previsionales y médicos.
Antes de empezar, necesitás tener:
Ingresá en afip.gob.ar y seguí los pasos de “Inscripción Digital”. Necesitás escanear tu DNI y verificar tu identidad por videollamada o app oficial.
Una vez con CUIT y Clave Fiscal, accedé a “Monotributo” desde el menú de servicios. Seleccioná “Adherirse al Monotributo”.
Te pedirá:
Las categorías dependen de:
AFIP tiene una herramienta automática que te sugiere la categoría adecuada. Podés cambiarla en junio e janeiro de cada año, o ante cambios en tu facturación.
En el mismo proceso, podrás elegir una obra social para monotributistas. Hay más de 200 opciones. Algunas cubren todo el país, otras son regionales.
Consejo práctico:
Investigá previamente cuál tiene mejores prestaciones en tu zona. Podés incluir familiares como adherentes pagando un extra mínimo.
Al finalizar, recibirás tu “Constancia de Opción”. Guardala o imprimila. Ya estás formalmente inscripto como monotributista y podés empezar a facturar.
Gabriel, desarrollador web, cuenta: “Pensé que iba a necesitar un contador, pero me registré solo en una tarde. Ahora tengo obra social y puedo facturar mis trabajos sin problemas.”
Inscribirte como monotributista es un trámite más fácil de lo que parece. Siguiendo estos pasos, podés empezar a trabajar formalmente, elegir tu obra social y emitir facturas sin complicaciones.
En el próximo apartado te explicamos cómo elegir la mejor obra social para monotributistas, con comparativas y recomendaciones.