
La Verificación Técnica Vehicular (VTV) es un proceso exhaustivo que evalúa múltiples aspectos de tu vehículo para garantizar que cumple con los estándares de seguridad y emisiones contaminantes.
Conocer en detalle qué puntos revisan los inspectores te permitirá preparar mejor tu auto y aumentar las posibilidades de aprobar en el primer intento. Este control abarca desde elementos básicos de seguridad hasta sistemas complejos del motor.
Uno de los primeros puntos que se evalúan en la VTV es el sistema de luces, fundamental para la seguridad vial tanto de día como de noche.
Los inspectores verifican el funcionamiento correcto de todas las luces del vehículo:
Además del funcionamiento, se revisa el estado físico de los faros. No deben estar opacos, rotos o con fisuras que afecten la proyección de la luz. Los faros muy deteriorados pueden ser motivo de rechazo.
Los neumáticos son elementos críticos para la seguridad, ya que son el único punto de contacto entre el vehículo y el pavimento.
Se mide la profundidad del dibujo en toda la banda de rodamiento. El mínimo legal es de 1,6 mm, pero se recomienda no llegar a este límite. Un desgaste irregular puede indicar problemas de alineación o balanceo.
Los inspectores buscan:
Se verifica que las llantas no tengan fisuras o deformaciones, y que todos los bulones o tuercas estén presentes y correctamente ajustados.
El sistema de frenos es uno de los puntos más críticos de la inspección, ya que de él depende la capacidad de detener el vehículo de forma segura.
Se realizan pruebas dinámicas para medir la capacidad de frenado del vehículo. Los frenos deben actuar de forma equilibrada en ambas ruedas y alcanzar la eficiencia mínima requerida.
Los inspectores evalúan:
Estos sistemas garantizan la estabilidad del vehículo y el control por parte del conductor.
Se evalúa el estado de los amortiguadores mediante pruebas específicas. Amortiguadores en mal estado afectan la estabilidad y aumentan la distancia de frenado.
Se verifica:
La VTV incluye una medición de las emisiones de gases contaminantes para verificar que el vehículo cumple con las normativas ambientales.
Se mide principalmente el monóxido de carbono (CO) y los hidrocarburos (HC) en el escape. Los valores deben estar dentro de los límites establecidos según el año del vehículo.
Se evalúa la opacidad del humo emitido. Un exceso de humo negro indica problemas en la combustión que deben ser corregidos.
La VTV también verifica la presencia y funcionamiento de elementos de seguridad básicos.
Todos los cinturones deben:
Para asegurarte de que tu vehículo esté en óptimas condiciones antes de la VTV, es recomendable realizar una revisión preventiva. Si detectás que necesitás reparaciones, existen opciones convenientes para financiarlas. Muchas entidades como Banco Nación, Santander o plataformas digitales como Mercado Crédito y Ualá ofrecen préstamos personales con condiciones flexibles que te permiten cubrir los gastos de mantenimiento sin comprometer tu presupuesto familiar.
Además, es un momento ideal para revisar tu seguro automotor. Compañías como La Caja, Sancor Seguros o Allianz no solo cumplen con el requisito legal, sino que también ofrecen servicios adicionales como asistencia mecánica las 24 horas, lo que puede ser muy útil si tu vehículo presenta algún inconveniente después de la VTV.
Antes de dirigirte a la planta de VTV, realizá una inspección casera de estos puntos:
Conocer qué revisan en la VTV te permite preparar tu vehículo adecuadamente y evitar rechazos que impliquen tiempo y gastos adicionales. Un auto bien mantenido no solo aprueba la VTV, sino que también te brinda mayor seguridad en cada viaje.