La accesibilidad en el transporte público argentino presenta desafíos significativos para las personas con discapacidad. A continuación, se detallan las principales dificultades que enfrentan:
Accesibilidad limitada en estaciones de metro
Solo algunas estaciones de metro en Buenos Aires están adaptadas para personas en silla de ruedas, lo que dificulta el uso del sistema para quienes tienen movilidad reducida.
Autobuses con rampas inadecuadas
Aunque muchos autobuses están adaptados, las rampas disponibles no siempre son seguras o fáciles de usar. Además, la falta de asistentes para ayudar en el embarque representa un obstáculo adicional.
Falta de infraestructura en las calles
Las veredas en mal estado, la ausencia de rampas y la falta de guías rebajadas afectan la movilidad de las personas con discapacidad, haciendo que el desplazamiento diario sea más difícil.
Información insuficiente en plataformas digitales
Los sitios de venta de pasajes a menudo no brindan detalles sobre la accesibilidad de los vehículos o estaciones, dificultando la planificación de viajes para personas con discapacidad.
Atención inadecuada en ventanillas presenciales
El personal de atención al público no siempre está capacitado para proporcionar información sobre accesibilidad o para ayudar en la compra de pasajes a personas con necesidades especiales.
Falta de señalización clara
La ausencia de señalización adecuada en estaciones y vehículos dificulta la identificación de áreas reservadas o adaptadas para personas con discapacidad.
Falta de asientos reservados
La escasez de asientos exclusivos para personas con discapacidad en el transporte público puede generar incomodidad e inseguridad durante el viaje.
Infraestructura inadecuada en estaciones
La ausencia de baños adaptados, ascensores y señalización en braille en las estaciones afecta la autonomía y seguridad de los pasajeros con discapacidad.
Falta de capacitación del personal
La falta de formación adecuada para conductores y empleados sobre cómo asistir a pasajeros con discapacidad puede derivar en experiencias de viaje negativas e incluso situaciones de riesgo.
Es fundamental que las autoridades y las empresas de transporte público en Argentina implementen medidas para mejorar la accesibilidad, garantizando que las personas con discapacidad puedan viajar con seguridad, comodidad y dignidad.