Consejos para usar tu préstamo de forma inteligente y evitar deudas

Solicitar un préstamo puede ser una herramienta financiera muy útil para alcanzar objetivos, cubrir imprevistos o consolidar deudas.

Sin embargo, para que sea una solución y no un problema, es fundamental usarlo de forma inteligente y planificar su devolución. Una gestión responsable de tu crédito te permitirá mantener tus finanzas sanas y evitar el sobreendeudamiento.

Planificación: La clave para un préstamo exitoso

Antes de siquiera pensar en solicitar un préstamo, la planificación es tu mejor aliada. No se trata solo de obtener el dinero, sino de asegurarte de que podrás devolverlo sin afectar tu calidad de vida.

1. Definí el propósito del préstamo: ¿Para qué necesitás el dinero? ¿Es una necesidad real o un deseo? Los préstamos son ideales para inversiones (educación, mejoras del hogar que aumenten su valor), emergencias (gastos médicos inesperados, reparaciones urgentes) o consolidación de deudas con tasas de interés más altas. Evitá pedir préstamos para gastos superfluos o impulsivos.

2. Calculá tu capacidad de pago: Este es el paso más crítico. Analizá tus ingresos mensuales y restale todos tus gastos fijos (alquiler/hipoteca, servicios, alimentos, transporte, medicamentos). El monto restante es lo que podrías destinar al pago de la cuota del préstamo. Como regla general, la cuota de un préstamo no debería superar el 30% de tus ingresos netos mensuales. Si ya tenés otros créditos, sumá todas las cuotas y asegurate de que el total no exceda este porcentaje.

3. Compará ofertas: No te quedes con la primera opción. Investigá en diferentes bancos, mutuales y entidades financieras. Compará no solo la tasa de interés (TNA – Tasa Nominal Anual), sino también el Costo Financiero Total (CFT), que incluye todos los gastos asociados (seguros, gastos administrativos, impuestos). El CFT es el indicador real de cuánto te costará el préstamo. Un CFT más bajo significa un préstamo más barato.

4. Elegí el plazo adecuado: Un plazo más corto implica cuotas más altas, pero pagás menos intereses en total. Un plazo más largo reduce el valor de la cuota, pero aumenta el costo total del préstamo debido a los intereses acumulados. Buscá un equilibrio que te permita pagar cómodamente sin ahogarte financieramente.

Para quienes buscan opciones de financiamiento, además de los préstamos ANSES para jubilados y pensionados, existen diversas opciones de préstamos personales para jubilados fuera de ANSES que ofrecen condiciones competitivas y pueden adaptarse a tus necesidades específicas.

Gestión inteligente de tu préstamo para evitar deudas

Una vez que el préstamo es aprobado y el dinero está en tu cuenta, la gestión responsable es fundamental para no caer en el ciclo de la deuda.

1. Usá el dinero para el fin previsto: Destiná el monto del préstamo exclusivamente para el propósito por el cual lo solicitaste. Evitá la tentación de usar una parte para “gustos” o gastos no planificados.

2. Pagá tus cuotas a tiempo: El pago puntual de las cuotas es crucial. Los retrasos generan intereses punitorios, recargos y afectan tu historial crediticio, lo que podría dificultar futuros accesos a crédito. Configurá recordatorios de pago o, si es posible, autorizá el débito automático de tu cuenta.

3. Considerá pagos anticipados: Si en algún momento recibís un ingreso extra (un aguinaldo, una venta, un bono), evaluá la posibilidad de realizar pagos parciales o totales de tu préstamo. Esto reduce el capital adeudado y, por ende, los intereses que pagarás a futuro, acortando el plazo del crédito. Consultá con tu entidad si existen penalidades por pago anticipado, aunque la ley argentina suele permitirlo sin costo.

4. Mantené un fondo de emergencia: Aunque hayas solicitado un préstamo para una necesidad específica, es vital seguir construyendo o manteniendo un fondo de emergencia. Este colchón financiero te protegerá de imprevistos futuros sin necesidad de recurrir a nuevos préstamos.

5. Evitá el sobreendeudamiento: No tomes un nuevo préstamo para pagar uno existente, a menos que sea una estrategia de consolidación de deuda con una tasa de interés significativamente menor. Caer en una “bola de nieve” de deudas es una trampa financiera muy común y difícil de salir.

Para una gestión financiera más eficiente, muchas personas utilizan aplicaciones de bancos y fintechs que permiten llevar un registro detallado de ingresos y gastos, programar pagos, y hasta categorizar transacciones. Estas herramientas digitales te brindan una visión clara de tu situación económica y te ayudan a tomar decisiones informadas. Bancos como el Banco Nación, Banco Provincia, y diversas fintechs, ofrecen soluciones de banca móvil que pueden ser de gran utilidad para organizar tus finanzas y mantener un control estricto sobre tus deudas.

Diferencia entre necesidades y deseos: La clave del uso responsable

Antes de utilizar el dinero del préstamo, es fundamental hacer una distinción clara entre lo que realmente necesitás y lo que simplemente deseás. Esta diferenciación te ayudará a evitar gastos innecesarios y a utilizar el crédito de manera más efectiva.

Necesidades básicas incluyen:

Deseos que pueden postergarse:

Establecer esta distinción antes de gastar te permitirá tomar decisiones más racionales y evitar el arrepentimiento posterior.

Estrategias para evitar el sobreendeudamiento

El sobreendeudamiento es una situación en la que tus deudas superan tu capacidad de pago, generando un círculo vicioso difícil de romper. Según datos recientes, muchos ciudadanos caen en esta trampa por el uso excesivo de tarjetas de crédito revolving y micropréstamos, que pueden llevar a tener en promedio siete créditos diferentes con pagos mensuales que comprometen seriamente el presupuesto familiar.

Señales de alerta del sobreendeudamiento:

Estrategias preventivas:

Si querés conocer más sobre cómo gestionar tus finanzas de manera efectiva, podés consultar cómo consultar el estado de tu solicitud de préstamo ANSES para mantener un seguimiento adecuado de tus compromisos financieros.

¿Qué hacer si te encontrás en dificultades para pagar?

A veces, a pesar de la mejor planificación, surgen imprevistos que dificultan el pago de las cuotas. Si esto ocurre, no te quedes de brazos cruzados:

1. Contactá a la entidad financiera: No esperes a que te llamen. Comunicarte proactivamente con el banco o la entidad que te otorgó el préstamo. Explicá tu situación y consultá sobre posibles soluciones.

2. Explorá opciones de refinanciación: Algunas entidades pueden ofrecerte planes de pago con cuotas más bajas y plazos más largos, aunque esto implicará pagar más intereses a largo plazo. Es una opción para evitar caer en mora.

3. Buscá asesoramiento financiero: Si la situación es compleja, un asesor financiero puede ayudarte a analizar tu presupuesto, negociar con los acreedores y diseñar un plan para salir de la deuda.

Herramientas digitales para el control financiero

La tecnología puede ser tu aliada para mantener un control efectivo de tus finanzas. Existen numerosas aplicaciones y plataformas que te permiten:

Muchas de estas herramientas son gratuitas y están disponibles tanto en bancos tradicionales como en fintechs especializadas.

Consideraciones finales

Usar un préstamo de forma inteligente implica responsabilidad y disciplina. Al seguir estos consejos, podrás aprovechar los beneficios del crédito sin comprometer tu estabilidad financiera, asegurando que tu préstamo sea una herramienta para tu bienestar y no una fuente de preocupación.

Recordá que la educación financiera es un proceso continuo. Mantenerte informado sobre las mejores prácticas de gestión del dinero te permitirá tomar decisiones más acertadas y disfrutar de una mayor tranquilidad económica en todas las etapas de tu vida.