Aunque parezca un trámite menor, no pagar el AFIP Monotributo puede traerte más problemas de los que imaginás.
Muchos contribuyentes comienzan pagando bien durante unos meses y, por diferentes motivos, se atrasan o se olvidan.
Pero la AFIP no se olvida. Y las consecuencias van mucho más allá de una simple deuda 💰
No importa si sos categoría A o H: estar al día es clave para mantener tu condición activa, evitar sanciones, acceder a cobertura médica y mantenerte dentro del sistema previsional.
Si no abonás tu cuota mensual a tiempo, empezás a acumular intereses. A los 10 días ya se generan intereses resarcitorios que aumentan cada mes.
Además, perdés automáticamente la cobertura médica desde el primer mes de atraso.
Después de 3 cuotas impagas consecutivas o 6 alternadas en 12 meses, la AFIP te da de baja de oficio del régimen.
Es decir, dejás de ser Monotributista formalmente, y no podés emitir facturas, ni acceder a beneficios previsionales ni sociales 😞
Si pasás más de 10 meses sin regularizar la deuda, la AFIP puede iniciar el juicio de ejecución fiscal, bloqueando tu CUIT y afectando tu historial financiero.
Sí. La AFIP permite regularizar deudas a través de planes de pago en cuotas.
Si acumulaste varios períodos impagos, podés ingresar al sistema Mis Facilidades y armar un plan personalizado. Eso sí: vas a necesitar una buena planificación financiera y, posiblemente, asesoramiento contable.
Además, en determinadas épocas del año, el Estado lanza moratorias o planes especiales para regularizar con quita de intereses o facilidades extra.
Por eso, mantenerse informado puede darte una ventaja enorme para ponerte al día sin colapsar tu economía personal.
✏️ Dato útil: Aunque estés dado de baja, podés volver a inscribirte como Monotributista, pero deberás regularizar la deuda anterior o demostrar que tu situación cambió sustancialmente.
Ignorar las deudas del Monotributo puede salirte mucho más caro que mantenerte al día. Si estás atrasado, cuanto antes te ocupes, mejor será el resultado.
Y si no sabés por dónde empezar, pedí ayuda o usá los simuladores de deuda para tomar el control de tu situación.